Outdoor training: qué es y en qué beneficia a tu empresa
Cada día más las empresas utilizan herramientas para fortalecer las habilidades y competencias de su talento. Esto pasa por cursos de formación, estimular el desempeño y realizar actividades que fortalezcan las relaciones entre los empleados y sus jefes.
Una de las técnicas más utilizadas actualmente es la conocida como Outdoor training, que tiene la ventaja de combinar actividades divertidas al aire libre con aprendizaje. Esta herramienta resulta muy útil para fortalecer equipos, reconocer habilidades y fomentar la creatividad.
Asimismo, es una excelente manera de compartir tiempo de calidad entre los compañeros de trabajo, ayudando a mejorar la comunicación personal. Para decidir si es una buena estrategia para tu organización, conoce en qué consiste en Outdoor training y los beneficios que puede traer a tu empresa.
¿Qué es el Outdoor training?
Se refiere a actividades que se realizan al aire libre a fin de ayudar a que un equipo se integre y descubra sus potencialidades. El Outdoor training está diseñado como una actividad educativa vivencial, en la que se busca que los participantes desarrollen ciertas habilidades mediante su experiencia.
Las actividades que se realizan en este tipo de entrenamiento, deben estar enfocadas en los objetivos que persigue la empresa. En este sentido, hay que tomar en cuenta que se realizan fuera del entorno laboral por lo que tienen que estar diseñadas para promover las destrezas que se busca reforzar.
El origen de esta técnica de aprendizaje se remonta a la Segunda Guerra Mundial, cuando se empezó a entrenar a los soldados al aire libre. Esto con la finalidad de que tuvieran experiencias similares a las que podrían encontrar en una batalla y estuvieran mejor preparados para responder a diversas situaciones de riesgo bajo presión.
Al momento de diseñar un Outdoor training para tu empresa, es importante tomar en cuenta los siguientes aspectos, a fin de que se logren los objetivos planteados:
- Lo primero que se debe hacer es buscar profesionales en el uso de estas técnicas, los cuales van a diseñar la experiencia con base a las características particulares de cada grupo.
- Es recomendable que la actividad tenga una duración de dos días, aunque son adecuados rangos entre uno a cinco días.
- Para que la experiencia sea más provechosa, se debe trabajar con grupos que permitan la interacción de distintas personalidades. Sin embargo, no deben ser tan grandes que se vuelvan poco manejables, por lo que un tamaño de 12 personas es muy recomendable.
- Las actividades a desarrollar deben ser innovadoras y salirse de la rutina del participante en la oficina.
- La mayoría de la experiencia debe ser vivencial y se debe tratar de crear situaciones donde las personas deban aprender a resolver conflictos.
- Tienen que ser actividades divertidas que motiven a los participantes y logren su atención en todo momento, a fin de que se sientan comprometidos.
- Al final de la actividad se debe realizar un feedback que permita a todos los participantes expresar sus experiencias y afianzar lo aprendido.
Las actividades de Outdoor training pueden ser muy diferentes, desde resolver un reto en equipo hasta superar distintos obstáculos. En este caso, es importante cubrir las distintas fases del proceso de aprendizaje, que incluyen la experimentación, compartir experiencias, interpretar situaciones y buscar soluciones.
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Beneficios del Outdoor training para tu empresa
Este tipo de procesos de aprendizaje puede ser algo costoso, por lo que te puedes plantear si realmente te brindan suficientes beneficios. En este sentido, es importante recordar que el principal activo de cualquier empresa es su recurso humano y tener empleados motivados y comprometidos, se ve a reflejar en una mayor productividad.
Algunos de los aspectos positivos que verás al realizar actividades de Outdoor training con tus trabajadores, son los siguientes:
Se fortalece el trabajo en equipo
Uno de los primeros aspectos que se trabaja con este tipo de aprendizajes vivenciales es el trabajo en equipo. Esto porque se deben resolver problemas en conjunto, en el cual todos los participantes deben ser parte de la solución.
Por otra parte, se identifican roles así como habilidades y actitudes de los empleados, que posteriormente es posible extrapolar al trabajo en la oficina. Las personas tienen que aprender a escuchar y ser escuchadas y participar activamente en cada parte del proceso.
Ayuda a identificar el liderazgo
Estas técnicas son muy útiles para identificar aquellos empleados que tienen mayores rasgos para ser líderes. Suelen ser los que toman decisiones en situaciones de presión y son capaces de guiar al grupo en la búsqueda de la solución al problema.
Además, suelen organizar las actividades y delegar tareas con base a las capacidades que perciben en los otros. Asimismo, son capaces de comunicarse con todos los miembros del equipo y mediar en situaciones de conflicto.
Fomenta la creatividad
Al enfrentarse a situaciones de presión en las que es necesario resolver un problema, la creatividad suele desarrollarse. Es frecuente que las personas planteen soluciones innovadoras y aprendan que un problema se puede abordar desde diferentes perspectivas.
El encontrarse en un contexto distinto al habitual, se hace más sencillo romper con paradigmas en la forma de pensar. Por tanto, surgen distintas maneras para alcanzar un objetivo o salir de una situación de riesgo.
Contribuye a la resolución de conflictos
Cuando un grupo de personas trabaja para un objetivo común, suelen generarse algunos conflictos asociados a las diferentes personalidades y formas de afrontar un problema. En un Outdoor training es posible dirigir estas situaciones, a fin de que los participantes puedan resolver sus diferencias de forma positiva.
Mejora las relaciones personales
Las personas que participan en la actividad se ven enfrentadas a situaciones estresantes que deben resolver en conjunto. Esto hace que aparezcan distintos rasgos de personalidad así como conexiones emocionales, que ayudan a una mejor comunicación entre los miembros del equipo.
En este contexto es posible visualizar diversos comportamientos que permiten conocer mejor a las personas. Asimismo, aquellos empleados que tienden a no expresar su opinión en el entorno de la oficina, se sienten con mayor libertar de hacerlo en un ambiente más distendido.
Se trabaja la confianza
Una de las grandes ventajas del Outdoor training es que las personas son capaces de percibir sus fortalezas y debilidades en una situación de presión. Esto los hace ser conscientes de habilidades que muchas veces no sabían que tenían y suele fortalecer la confianza en sí mismos.
Además, perciben la forma en que reaccionan ante situaciones de gran presión y su capacidad de asumir responsabilidades. Posteriormente, este comportamiento se puede llevar al entorno laboral y así mejorar su desempeño y productividad.
Contribuye a aumentar la motivación
Las actividades de Outdoor training suelen ser bastante divertidas y emocionantes, lo que hace que los empleados se sientan mucho más relajados y cómodos. Además, se suelen fortalecer lazos con otros compañeros y sentirse parte de un equipo.
Esto permite reforzar los valores de la empresa y que los participantes se sientan mucho más identificados con esta. Y definitivamente un empleado que se siente motivado, va a tener un mayor rendimiento y compromiso con su trabajo.