¿Cómo conseguir la cédula de habitabilidad de un local?

Si estás pensando en solicitar una cédula de habitabilidad de un local y no sabes cómo hacerlo, estás en el lugar adecuado. Eso sí, antes de conseguirla tendrás que tener la certeza de que el local ha sido adaptado adecuadamente a las necesidades mínimas para obtener la cédula.

Cada vez son más las familias que optan por vivir en un local, pero para hacerlo es necesario que el mismo tenga la cédula de habitabilidad.

¿Qué es la cédula de habitabilidad?

A través de la cédula de habitabilidad podemos tener un documento con el cual acreditar que una vivienda o local en este caso, reúne los requisitos técnicos e higiénico sanitarios mínimos para ser considerados como lugar habitable. Con esa documentación se puede contratar servicios y suministros, a la vez que también se puede alquilar o vender.

Teniendo en cuenta la información del Ministerio de Fomento, se puede definir como “documento que certifica la legalidad de la vivienda”.

Como podemos leer en https://www.arkespai.com/cedula-de-habitabilidad-valencia/, arquitectos expertos en cédulas de habitabilidad en Valencia, el trámite no puede ser gestionado por cualquier persona, sino que debe ser gestionado por un arquitecto profesional como los de Arkespai. Gracias a ese profesional se podrá comprobar que el inmueble, en este caso el local, cumple con los requisitos mínimos.

El arquitecto lo que hará es certificar de manera profesional la superficie útil del local, los equipamientos y los otros exigidos por la autoridad competente. En caso de que el local no tenga los requisitos mínimos, el arquitecto podrá encargar las obras necesarias para adaptar el espacio y conseguir que el local pueda ser habitable. Recuerda, sin la ayuda de un arquitecto no podrás obtener la cédula de habitabilidad.

¿Cuáles son los requisitos para conseguir la cédula de habitabilidad?

Como nos comentan los arquitectos de Arkespai, los requisitos para conseguir la cédula de habitabilidad de una vivienda o un local son prácticamente los mismos. Eso sí, no es lo mismo solicitarla en Valencia que por ejemplo en Madrid. Es importante tener en cuenta que los requisitos pueden variar ligeramente según la Comunidad Autónoma.

Para que te hagas a la idea, normalmente se suele tener en cuenta la superficie útil y la distribución. Es importante que cumplan los requisitos mínimos para que la cédula pueda ser aprobada para el local que se quiere convertir en vivienda.

Por supuesto, también se tienen en cuenta otros aspectos como la altura, número de habitaciones, la seguridad y la salubridad. Contratando a un arquitecto profesional podrás tener la certeza de que él te dará todas las orientaciones necesarias para conseguir unos buenos resultados.

¿Cuáles son los tipos de cédula de habitabilidad?

Actualmente podemos encontrarnos tres tipos de cédula de habitabilidad entre los que elegir.

  • Cédula de habitabilidad de primera ocupación: está relacionada con la licencia de primera ocupación la cual debe ser entregada por el ayuntamiento promotor.
  • Cédula de habitabilidad de primera ocupación por rehabilitación: va ligada a inmuebles que han sufrido una reforma importante.
  • Cédula de habitabilidad de segunda ocupación: está ligado a las viviendas que están identificadas y habitadas con anterioridad.

¿Cuánto dura la cédula de habitabilidad?

Por regla general la duración de la vigencia de la cédula de habitabilidad suele ser de 15 años. Eso sí, la durabilidad siempre va ligada a la fecha de otorgamiento.

Por ejemplo, las cédulas de primera ocupación otorgadas antes de 2004 tienen una vigencia de 10 años. Las emitidas hasta 2012 tienen una vigencia de 15 años, mientras que las posteriores a esa fecha es de 25 años. En cuanto a las cédulas de segunda ocupación tiene una vigencia general de 15 años.

¿Cuándo se debe tramitar la cédula de habitabilidad?

Se debe disponer de ese documento para vender o alquilar el local que queremos destinar como vivienda.

También será necesario para convertir el local en vivienda. Una vez que se tiene la cédula de habitabilidad se puede acceder y en consecuencia dar de alta servicios necesarios para la vivienda. Por ejemplo, podrás dar de alta servicios como gas, luz o agua.

¿Cómo puedo tramitar la cédula de habitabilidad?

Como hemos comentado anteriormente, para realizar el trámite tenemos que contratar servicios de arquitectos profesionales como los de Arkespai en Valencia. En ocasiones también puede ser válido contratar a un aparejador colegiado. Una vez realizada la contratación, el arquitecto tendrá que visitar el local que queremos convertir en vivienda para certificar que el mismo cumple los requisitos necesarios. Como hemos comentado, los requisitos dependen directamente de cada Comunidad Autónoma.

Una vez que el arquitecto haya realizado la inspección, el mismo emitirá un certificado, el cual posteriormente será visado por el Colegio de Arquitectos. Es importante luego presentarlo a la autoridad competente con la cual se expedirá la cédula de habitabilidad.

Para que te hagas a la idea, el trámite completo tarda en tramitarse. En ocasiones puede llegar a tardar hasta tres meses.

Es importante certificar que algunos ayuntamientos no exigen ese documento, pero sí que obligan a completar una declaración responsable. Pero para evitar problemas, lo mejor es contratar a un arquitecto para certificar que la vivienda es la adecuada y así evitar problemas a medio y largo plazo.

¿Qué precio tiene una cédula de habitabilidad?

El precio irá directamente ligado al arquitecto que vaya a realizar el servicio y sobre todo a la Comunidad Autónoma en la cual se haga.

Por ejemplo, los expertos de Arkespai nos han comentado que el certificado en Valencia puede estar listo por 70 euros, lo que significa que no es muy caro. Pero como hemos comentado, todo dependerá del trabajo, del lugar y del arquitecto que haga el trabajo.

En el precio se suele incluir el desplazamiento del profesional, la entrega del certificado, el IVA y demás servicios. A cambio, el precio no incluye la cumplimentación del formulario en el ayuntamiento, el pago de las tasas municipales, ni las tramitaciones en el ayuntamiento. Dependiendo del arquitecto, los servicios que no están incluidos se pueden incluir o no. Por supuesto, a cambio de un pago extra. Lo que está claro es que lo importante es ponerse en manos de profesionales para tener la certeza de que el trámite va a darnos los resultados esperados.