Tips y consejos sobre diseño de productos

El diseño de los productos es una característica esencial para captar la atención de los consumidores e incrementar el número de ventas. El diseño resulta clave prácticamente en todos los aspectos. La estética es esencial para llamar la atención, para despertar emociones, para destacar entre la competencia y para vender. Aunque, el diseño del producto incluye otros factores que no se basan solamente en el aspecto. El diseño incluye todo el proceso de creación desde que surge la idea hasta que se comercializa el producto. Si realizamos correctamente este proceso conseguiremos destacar entre la competencia y que nuestro producto obtenga un elevado porcentaje de ventas. A continuación, explicamos varios tips sobre el diseño de productos. ¡Comenzamos!

Piensa en el producto

Lo primero que debes hacer, antes que nada, es decidir que producto vas a comercializar y cuál es el motivo por el cual ofreces este producto y no otro. Por ende, es fundamental que definas en qué líneas vas a trabajar y a continuación analizar a la competencia. De esta forma conseguirás saber en qué aspectos destacan y en cuáles están fallando y, a raíz de ese momento comenzar con el siguiente paso.

Sé creativo

Acabas de decidir qué tipo de producto vas a ofrecer al mercado, así como los aspectos a mejorar y a evitar llevados a cabo por la competencia. Ahora es cuando entra en juego tu creatividad y para ello es fundamental que tengas muy claro lo que vas a hacer, así que tómate el tiempo necesario para poder decidir qué características va a tener tu producto. Algunas empresas a la hora de lanzar un nuevo producto al mercado suelen realizar algunas dinámicas de intercambio de ideas que reciben el nombre de “brainstorming” que traducido al español vendría a significar algo así como lluvia de ideas. Un ejemplo de tienda especializada que trabaja estupendamente el diseño de productos es Sabat. Ellos han trabajado un sector poco explotado como son los ligados metálicos cuidando cada detalle de los mismos.

¿Es viable?

Algo que debes de tener en cuenta es que muchas veces nos vienen a la cabeza infinitud de ideas que, a simple vista parecen estupendas, pero, a la hora de la verdad, no son para nada viables. Asegúrate de que este no sea tu caso para no fracasar en el intento y decídete por un producto que sea viable y que puedas afrontar dándole las condiciones más óptimas en el momento de desarrollo y fabricación.

Lo primero que vemos es el exterior

Como comentaba en la introducción lo primero que vemos a la hora de comprar un producto es el exterior. Con ello qué quiero decir… pues que la calidad del producto pasa a un segundo plano en el primer contacto que tenemos con él. Lo primero que hacemos en fijarnos en el aspecto y si este no nos llama la atención lo descartamos sin prestar atención. Al menos así ocurre en la mayoría de los casos en los que no tenemos conocimientos del mismo y no vamos buscando una marca específica, en estos casos ya juegan otras técnicas especializadas de la mercadotecnia.

Así que, el diseño en este caso juega un papel fundamental y por ende debemos pensar siempre en que los productos sean lo más atractivos posibles, visualmente hablando.

Comercialízalo

Una vez que ya tengas todo preparado encárgate de su comercialización y de lanzarlo al mercado. Espera a que las condiciones sean ideales y a que tu producto ya esté totalmente preparado sin que pueda haber errores o que no seas capaz de afrontar los gastos. Una vez esté todo preparado tu producto estará listo para ser vendido y, si has seguido bien todos los paso que hemos explicado, tendrás el éxito garantizado.